La exposición “Recordar: volver a pasar por el corazón” consiste en un recorrido sensorial a través de la memoria y las experiencias de la guerra durante el conflicto armado interno del país.
Los objetos, rostros y relatos pertenecen a víctimas del conflicto, integrantes de la Mesa Autónoma de Participación de Pueblos Indígenas, negros, afrocolombianos, raizales y palenqueros, quienes participaron de forma activa en la construcción de esta exposición para contribuir al reconocimiento de su identidad cultural, pluralidad de narrativas y construcción de memorias.
Cuenta con siete estaciones que permitirá a los visitantes, experimentar de forma solidaria situaciones del conflicto que han vivido más de 8 millones de víctimas en el país, evocando la necesidad de volver a pasar por el corazón para darle sentido al presente.
Esta nueva exposición en Bogotá, se inaugura en el marco de la conmemoración de los 70 años de la declaración de la Carta Universal de los Derechos Humanos.
“Recordar: volver a pasar por el corazón” será inaugurada en el Centro de Memoria, Paz y Reconciliación el lunes 10 de diciembre a partir de las 6:00 p.m. Esta exposición es iniciativa de la Alcaldía de Bogotá a través de la Alta Consejería para los Derechos de las Víctimas, la Paz y la Reconciliación y estará abierta al público desde el martes 11 de diciembre en jornada continua.
“Continuamos avanzando en la consolidación de Bogotá, como referente nacional de paz, a partir de la construcción de espacios pedagógicos que se mantendrán de manera permanente en las instalaciones del Centro de Memoria, Paz y Reconciliación avanzando hacia la generación de escenarios de encuentro, diálogo y reflexión”, afirmó Gustavo Quintero, alto consejero para las Víctimas del Distrito.
Las siete estaciones de la exposición permanente son:
- La memoria a través de los objetos
A través de la observación de objetos que pertenecen a víctimas del conflicto y que estarán expuestos de manera física y virtual, como la relación de historias con estas piezas, el visitante podrá cuestionarse sobre los objetos que pondría en las vitrinas en caso de tener que contar su propia historia. Asimismo, evidencia que la guerra está cargada de cotidianidad y no solo se suscribe a elementos bélicos.
- Polifonías del miedo
Cuando el visitante se acerca a la estación, a través de seis sonidos diferentes de alerta, se produce un efecto polifónico que invita al participante a comprender cómo la guerra afectó de manera directa y cotidiana a distintos habitantes de la capital.
Todos estos sonidos evocan un estado emocional causado por el conflicto armado que durante décadas estremeció a los bogotanos, el cual se manifestaba de manera diferencial según el sector socioeconómico y lugar de residencia.
- Rostros que trasforman la ciudad
A través de 18 cubos ubicados en cuadrícula, los visitantes descubrirán las implicaciones del desplazamiento, siendo una estación análoga con múltiples posibilidades de interacción frente a la identidad, cultura, ubicación, espacio temporal y diversidad que han vivido las personas víctimas de este flagelo que residen en la capital.
Además, genera interrogantes como: ¿Quiénes son los desplazados?, ¿de dónde vienen?, ¿qué extrañan?, ¿cómo se relacionan con Bogotá?, ¿en dónde y cómo viven?
- Paz en movimiento
Comprender la paz como una construcción continua, donde la sociedad civil ha sido protagonista es el objetivo central de esta estación. El visitante podrá recorrer un túnel que contará con proyecciones en las paredes, generado el efecto de estar presente en el interior de una de las tantas movilizaciones que se han presentado en Bogotá. Estas movilizaciones proyectadas irán cambiando a través del uso de la técnica del “mapping”, incorporando sonidos que permitirán ampliar la experiencia sensorial de los asistentes.
Una estación que busca rendir homenaje a los sueños y la voluntad inquebrantable de los ciudadanos, organizaciones sociales, quienes a través de la manifestación pacífica han hecho de la paz la bandera de su lucha.
- Diálogo permanente
A través de esta estación se busca que los visitantes puedan reunirse en una “mesa de diálogo” que invita a asumir roles de los distintos actores sociales (empresarios, estudiantes, Estado, víctimas, reincorporados, organizaciones sociales y comunidad internacional), permitiendo la construcción de acuerdos a través del diálogo y materiales dispuestos, para ser parte de un proceso participativo y colaborativo en la construcción de paz.
- Miradas de la guerra en la ciudad
En esta estación el visitante se aproxima a distintos hitos ocurridos en la capital, en el marco del conflicto armado y a través de la óptica de diversos medios expresivos y narrativos (prensa, fotografías, textos literarios, secuencias de noticieros, producciones audiovisuales, contenidos de redes sociales y materiales pedagógicos).
Los visitantes podrán cuestionarse sobre cómo la memoria colectiva y selectiva están presentes en el recordar del individuo. Genera además interrogantes sobre por qué se fijan en nuestra memoria ciertas imágenes e invita a los asistentes a visualizar las suyas, si tuvieran que narrar el conflicto y sus hitos que durante décadas vivió la capital.
- El incalculable peso del desplazamiento forzado
La población víctima de desplazamiento forzado llegó de todas partes. Comenzaron a llenar los parques, los andenes y las calles. La mayoría traía ropa de tierra caliente y su acento arrastraba el rumor de los llanos y la selva. En los semáforos levantaban una cartulina con letra apretada en la que describían su situación. Eran víctimas de desplazamiento forzado, una palabra tan incomprensible para los bogotanos como el dolor que estas personas cargaban sobre su cuerpo.
Cuando las víctimas de desplazamiento forzado llegan a otra ciudad las precede una estela de violencias que las obligó a dejar atrás su territorio y sus vidas. El peso de los sentimientos y las emociones que traen consigo es incalculable, motivo por la que esta instalación invita al ciudadano a cuestionarse ¿cuánto cree que pesa el desplazamiento forzado
También, durante el 10 de diciembre, el Centro de Memoria, Paz y Reconciliación ubicado en la carrera 19b#24 – 86, llevará a cabo otras actividades que buscan integrar a todos los grupos poblaciones de la ciudad.
“Camino a casa” - 3:00 p.m., Centro de Memoria, Paz y Reconciliación.
Este nuevo espacio corresponde a una sala infantil, dirigida a niños y niñas víctimas del conflicto armado interno y visitantes del Centro de Memoria, Paz y Reconciliación, quienes podrán disfrutar de una experiencia de aprendizaje y encuentro con las culturas, a través de una serie de actividades y programación variada en donde el juego, la literatura y los lenguajes artísticos, se convertirán en herramientas para convocar, evocar saberes y tejer reflexiones sobre las nociones de verdad, memoria, paz, y reconciliación.
Además, la cultura de las tradiciones permitirá hacer visible un territorio diverso, reflejando elementos de identidad. Un escenario que generará ambientes de acuerdos, fantasías, reflexiones y júbilos que cualifican la cotidianidad.
“Taller de oficios”
Un espacio para que las víctimas del conflicto y organizaciones se reúnan para construir memoria con sus manos, a través de talleres y actividades pedagógicas. Estos colectivos contarán con un nuevo espacio donde podrán avanzar hacia la construcción de una verdad reparadora que fortalezca sus procesos individuales y grupales para la construcción de paz y la dignificación de sus historias.
Las organizaciones partícipes en la consolidación de este nuevo espacio corresponden a Cartongrafías de la Memoria, Unión de Costureros, Kilómetros de Vida, Costurero Emberá y Madres Víctimas de Falsos Positivos – MAFAPO.